La Asociación francesa ASPAS (Asociación para la Protección de los Animales Salvajes) ha publicado un comunicado con un vídeo impactante de la realidad que vive el lobo en todas partes. En este caso, es un vídeo filmado en los Alpes franceses.
Dicen: "Imagina una justicia que condene a las personas antes de cometer algún delito, sin ni siquiera saber si realmente cometerán un delito"... Esto es lo que pasa con el lobo. Y el gobierno lo aprueba.
Siendo especie "protegida" por ley en Europa y en Francia, le asesinan impunemente con nocturnidad, alevosía, mira telescópica y visor nocturno.
Estas imágenes las filmó un fotógrafo de vida salvaje, Corentin Esmieu, la noche del 5 de julio (este domingo pasado) en el paso de Lautaret, en los Altos Alpes.
Hay un rebaño de ovejas dentro de un redil, protegido además por perros e incluso hay un burro para alertar. En caso de que hubiera habido algún movimiento, los perros habrían arremetido hacia el lobo. Pero no hay movimiento cuando el lobo pasa de largo junto al vallado. El lobo pasa de largo, y cuando se alejaba, es aniquilado de un disparo. Después, los asesinos vienen a recoger el cuerpo y lo celebran con júbilo.
Un hecho que ASPAS denuncia, que dice que ocurre desde 2004 constantemente. Como dicen ellos, DISPAROS POLÍTICOS que responden al odio de los ganaderos, con el fin de no perder votos.
Estas muertes no solo no son eficaces para supuestamente proteger el ganado del lobo sino que aumentan las probabilidades de daños, como he venido explicando en multitud de ocasiones y en varios artículos de este mismo blog. Estas muertes desestabilizan los grupos, provocan que haya lobos solitarios, lobos juveniles que no han tenido oportunidad de aprender adecuadamente... y por tanto, son el caldo de cultivo para los daños al ganado. Esto está demostrado por datos empíricos. Los daños son directamente proporcionales a las muertes de lobo por disparo. La explicación ecoetológica es lógica, es clara y contundente.
En este caso, las medidas preventivas (el vallado y los perros) mostraban ser perfectamente eficaces, pero los asesinos prefirieron dar rienda suelta a su odio y matar al lobo. Como dice ASPAS, la autorización de matar hasta el 19% de la población de lobos en Francia, están poniendo en peligro a una especie protegida y además no sólo no garantizando la disminución de daños sino, como se ha demostrado, aumentándolos, perpetuando el miedo y el odio al lobo.