Agentes de Medio Ambiente abaten un lobo en Hinojosa de Duero. Salamanca.
Una hembra grande. De nuevo, la despreciable patrulla antilobo... compuesta por Agentes Medio Ambientales PAGADOS POR TODOS, con dinero público, para aniquilar nuestros lobos, nuestra biodiversidad.
¿Por qué lo hacen? Por dinero, por votos. Por el voto de unos pocos ganaduros que lloriquean, a pesar de no usar medios preventivos adecuados, a pesar de las subvenciones que reciben y que no recibe ningún otro profesional, de las indemnizaciones que tampoco recibe nadie, y de todas las ventajas y mimos con que se les obsequia privilegiadamente. Su incesante lloriqueo, basado en esa máxima que reza "quien no llora, no mama" consigue que los políticos, con sus trajes y zapatos, salgan en las imágenes para decir sandeces y pedir la muerte al lobo.
Parece que estuviéramos hace un siglo, pero no; es actual. Y siguen haciendo que más y más gente nos posicionemos contra ellos a cuenta de su odio irracional, absurdo, patético y visceral, al lobo. Cada vez que matan un lobo, crece nuestra aversión y repugnancia hacia ellos, que ya se va convirtiendo en odio.
Han matado una loba. Una loba más. Una loba grande, supongo que una loba adulta, lo que aún es más grave si cabe. Dicen que "para reducir los ataques al ganado". De nuevo la misma execrable patraña de que matar lobos reduce los daños al ganado, cuando sabemos de sobra que los daños son directamente proporcionales al número de lobos matados. Que matar lobos aumenta directamente los daños al ganado, lo que es lógico pues desmembra los grupos, hace que los juveniles cacen ganado y se habitúen a ello...
Cuando sabemos que lo que sí reduce los daños incluso en un 100% es el uso de mastines como método preventivo. Pero no les interesa; no quieren métodos preventivos. Unos prefieren idear nuevos inventos del tebeo de los que sacar euros, otros prefieren indemnizaciones y dar más pena para conseguir más euros que otros les darán a cambio del voto rural, que es lo que estos últimos prefieren.
VOTOS Y EUROS a cambio de vida de lobos. Sólo engañan a los ignorantes, a los analfabetos, a los desinformados, a los majaderos.
Salamanca sigue siendo uno de los agujeros negros para los lobos ibéricos. De esta forma, sigue siendo uno de los puntos donde se cronifica el problema creado de los daños al ganado. Lo cronifican adrede.
La patrulla antilobo de la Junta de Castilla y León, saberlo todos, esa que llaman ellos "de Seguimiento de Fauna" para quedar bien, es una patrulla formada por repugnantes guardas, auténticos sicarios, que viven del cuento de nuestro dinero para pasearse por los montes con el rifle preparado (muy grave, debería estar penado) buscando lobos a los que luego aniquilan de forma asquerosa e impune, furtiva y clandestina, sin que nadie se entere. A tiro hecho, nunca mejor dicho, sale entonces en los periódicos de siempre, en los que los periodistas de siempre echan más mierda al lobo con embustes y patrañas increíbles para vender su noticia.
A todo esto, el asesinato de la loba se produce al sur del Duero, donde el lobo está estrictamente protegido por leyes europeas (Directiva de Hábitats). Pero sin la premisa fundamental de haber hecho uso de métodos preventivos adecuados, sin utilizar medios alternativos no letales, sin demostrar que el matar lobos no afecta al estado de conservación de la especie (que, al ser desfavorable, no puede justificarse). Por tanto, se hace de forma ILEGAL. Pero impunemente. Porque son así de CHULOS.
Ahora buscan otro lobo con el que saciar su sed de sangre. Otro de nuestros lobos va a morir pronto asesinado por los sicarios de esta dictadura en esa zona en la que están "estrictamente protegidos". Quién lo diría.
Esta inversión (con nuestro dinero) que hace la Junta que paga a los sicarios matalobos, que son iguales a los loberos de hace cien años, es para mantener a los ganaduros contentos y que les voten. Voto rural jugoso. Qué ascazo dan todos.
En Castilla y León se matan lobos aunque no haya daños, por norma y no por excepción, como todos sabemos. Han autorizado el asesinato de 339 lobos. Una auténtica locura. Un exterminio.
